El Chicago Children’s Museum ha montado una exposición para incentivar la imaginación de niños y niñas. Se trata de la creación de cosas extraordinarias en base a una caja de cartón. El Museo invita a los pensadores creativos y “manitas” de cartón para descubrir el potencial ilimitado de este material engañosamente simple.
Hicieron una prueba y transformaron una sala del museo en una tienda de juguetes. Pero cuando entraron los niños, solo encontraron cajas de cartón. El packaging únicamente consistía en una pegatina, puesta en la caja desmontada, con el logotipo y una ilustración de las posibilidades creativas de la misma, con un total de 30 diseños distintos.
Los niños y niñas contaban con las herramientas necesarias para modificar estas cajas de cartón: pegamento, tijeras, plumas, colores, cinta… para obtener esa bonita realidad que les mostraba la máquina (a través de un código de realidad aumentada) y convirtieron sus cajas en coloridos juguetes de los que sentirse satisfechos.
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