La empresa conservera Nixe quería lanzar una nueva línea premium rompiendo con la estética habitual de este tipo de productos y añadiendo un espíritu moderno pero sin dejar de ser tradicional. Con este briefing en las manos, la agencia Vibra, especializada en branding y packaging, llegó hasta la estética de los tatuajes marineros.
El tattoo nació en el mar y llegó a la tierra en los brazos y torsos de pescadores, piratas y corsarios. Quizás sea por eso por lo que, dentro de la estética marinera, es uno de los elementos visuales de mayor fuerza, incluyendo así en su estrategia de marca: conservas con sabor a mar tanto en el producto como en el envase.
El resultado es una imagen atractiva que sorprende al público acostumbrado a una estética de productos de conserva más tradicional. Este diseño ha sido premiado con el Mejor Packaging de Alimentación en el año 2015. Todo un premio para una gran idea llevada a cabo de una manera muy cuidada, hasta en el último detalle.
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