En la película de 1999 ‘Cómo ser John Malkovich’, un marionetista callejero (John Cusack) descubre un extraño túnel que le transporta directamente, de forma literal, a la mente del famoso actor, que en el filme se interpreta a sí mismo. Bajo la dirección de Spike Jonze y curioso guión de Charlie Kaufman, Malkovich obtuvo numerosos premios de la crítica y se hizo con tres nominaciones a los Óscar.
Por el contrario, ahora, en su último proyecto, el polifacético intérprete deja de ser John Malkovich para convertirse en míticos personajes del siglo XX. La historia comienza hace 18 meses, cuando el fotógrafo Sandro Miller viaja a Francia para persuadir a la única persona que, según el artista, estaría dispuesta a involucrarse en su idea: recrear algunas de las fotos más famosas de todos los tiempos. Cómo no, esa persona era John Malkovich, con quien ya había trabajado en diferentes ocasiones y a quien conocía desde hace 17 años. Dicen las malas lenguas que dos botellas de vino después ya tenía convencido al actor.
El resultado del proyecto es genial. John Malkovich posa disfrazado un total de 35 fotografías célebres del siglo XX, como el Dalí de los puntiagudos bigotes, el Che Guevara de Alberto Korda, la Marilyn Monroe de Bert Stern, o el Albert Einstein sacando la lengua de Arthur Sasse. Las imágenes de Miller traspasan el objetivo gracias al meticuloso trabajo del maquillador Randy Wilder, la estilista Leslie Pace, la escenógrafa Ángela Finney y, por supuesto, del propio fotógrafo y la estrella de Hoollywood.
De hecho, según explica el fotógrafo, la implicación de Malkovich fue decisiva: “Se podía ver a John trabajando en su personaje mientras le estaban maquillando. Fue realmente una alegría ver un perfeccionista en pleno trabajo”.
Sandro Miller, que es un referente en el mundo de la publicidad y tiene una cartera de clientes tan importantes como Coca-Cola, BMW y Samsung, sostiene que el proyecto es un homenaje a la tradición fotográfica: “Quiero que la gente vuelva a mirar estas imágenes icónicas y sienta la fuerza, el poder y la historia que un retrato puede alcanzar”.
La colección se exhibirá en la galería Catherine Edelman a partir del próximo 7 de noviembre, hasta el 31 de enero del 2015. Después viajará a diferentes ciudades como Los Ángeles, Nueva York, Dallas, París e Italia. Finalmente, se editará un libro con las fotografías y un documental.
Visto en el Periódico y en mis gafas de pasta